Forma parte de las terapias alternativas para tender las necesidades físicas, emocionales y cognitiva de las personas.

Se utiliza tan con niños, adolescentes y  adultos con problemas emocionales, psiquiátricos, adicciones, inadaptación social, problemas traumáticos.

Es realizado por profesionales formados en musicoterapia.

Los pacientes son derivados al musicoterapeuta, y la decisión de iniciar este tipo de terapia recae sobre él. Si trabaja en equipo se comparte la decisión con el resto de los profesionales del equipo (psicólogos, psiquiatra, terapeuta ocupacional, enfermería..) ,antes de ser aceptado el paciente se le realizan unas pruebas para ver la conveniencia de este tratamiento.

Se toman en cuenta las siguientes áreas de funcionamiento: cognitiva, psicológica, psicosocial, afectiva, de comunicación, así mismo se deberá considerar las limitaciones de movimiento o deambulación de algunos pacientes a la hora de elegir las actividades.

En los centros educativos de primaria y secundaria el objetivo del aula de musicoterapia es ayudar al niño o adolescente a superar sus problemas emocionales, neurológicos o psiquiátricos. El musicoterapeuta trabaja en estrecha colaboración con el profesor del alumno y coordinándose con otros profesionales si es necesario.

El material que se precisa es un equipo de música, piano, xilofón, compact disc, libro de canciones infantiles y juveniles.

El tipo de música que se suele seleccionar se adecua a cada paciente, por ejemplo en un niño pequeño en el que el terapeuta advierte que esta golpeando insistentemente un instrumento de forma desordenada lo que puede indicar que esta muy excitado se intentará elegir una música con un ritmo suave, con un tempo lento.

Tipos de música: si se trata de niños se usan composición musicales cortas extraídas de clásicos populares, músicas de películas infantiles, canciones de cuna para los bebés. Música de películas para adolescentes, de cantantes actuales.

La planificación del tratamiento se comienza con una exhaustiva evaluación inicial, que puede requerir 2 ó 3 consultas ya que de ella depende correcto planteamiento de objetivos generales (a largo plazo), cuya finalidad es ayudar a conseguir, tomando como ejemplo la depresión que la supere.

Los objetivos específicos a corto plazo son pequeñas metas relativamente fáciles de conseguir.

Las modalidades de tratamiento pueden ser individual o en grupo, tras realizar la valoración previa.

En el caso de tratamiento individual la etapas del tratamiento:

• son observación, actitudes, comportamiento y preferencias musicales.
• establecimiento de un buen vinculo con el paciente.
• trabajar en la consecución de los objetivos diseñados.
• ayudar a lograr su autonomía personal y a realizarse como persona en todos los aspectos: físico a través de la danza, emocional con la audición de piezas musicales, y social como en las sesiones de grupo donde el canto, la danza, la expresión verbal facilitan la solidaridad y el respeto a los demás.

Los propósitos son lograr una mejor calidad de vida y permitir descubrir sus propios valores, interés, y vocaciones, en definitiva que puedan conseguir su realización personal.

Bibliografía:

• Tolstoy L.What is art?En Ross:D, ed.Art and its significance 3ª ed.Albany 1994.
• Reimer B. A Philosophy of music education. Englewood Cliffs, 1970.
• Vaillancourt, G. (2009). “Música y musicoterapia. Su importancia en el desarrollo infantil”. Madrid. Nancea.